Desde Miniland Baby queremos ayudar a los padres a entender cómo añadir los alimentos en la dieta de los bebes, principales consejos:
Cómo añadir los alimentos en la dieta de los bebés
- No añadir sal a las preparaciones: las necesidades de sodio (presente en la sal común) en el bebé, son inferiores a las de las personas adultas. Éste alcanza sus necesidades a través de los alimentos que toma de forma natural. Además conseguimos que se acostumbre a aceptar los platos con este grado de palatabilidad.
- No abusar del azúcar: educar al bebé a consumir lácteos y compotas en estado natural ya que, el uso de la sacarosa (azúcar común), habitúa al bebé al sabor dulce de los alimentos. La sacarosa es uno de los principales causantes de la caries dental.
- Dar agua con frecuencia: para acostumbrar a su toma y evitar la deshidratación. Puede ser mediante la toma de agua sola, sin azúcar, o zumo de frutas sin adición de azúcar. Las necesidades de agua en el bebé, aumentan en diversas circunstancias
como: elevada temperatura ambiental o por calefacción (calor), fiebre, diarrea, comidas espesas, etc. Además, como no ha desarrollado totalmente la capacidad de concentrar la orina, es necesaria más cantidad de agua para disolver sustancias que se eliminan por la orina. - Introducción de los alimentos: cada vez que el bebé vaya a consumir un nuevo alimento, éste se debe introducir en pequeñas cantidades, e ir aumentando la cantidad progresivamente.
- Dar a conocer los alimentos y desarrollar el gusto: en el momento de introducir al bebé los alimentos de cada grupo, según la edad, se debe considerar su introducción de uno en uno, para posteriormente poder mezclarlos. De
este modo se consigue que el bebé conozca los diferentes alimentos, sus sabores y se acostumbre a ellos. Además es útil en la identificación de posibles alergias alimentarias tras el consumo de determinados alimentos.
Debe tenerse en cuenta que se está ofreciendo al bebé progresivamente los cuatro sabores básicos (salado, dulce, amargo y ácido), alternando con las sensaciones térmicas (caliente, tibio y frío), las sensaciones táctiles (blando, crujiente, espumoso, meloso y otras consistencias más o menos espesas) y sensaciones visuales (por ejemplo, alimentos de colores y formas diferentes). Por todo ello, es importante conocer los siguientes aspectos:
- 6-7 meses: la alimentación para bebés de 6 meses en adelante se basa en la preferencia por lo dulce.
- 8-10 meses: preferencia por lo salado antes que el sabor dulce.
- Hasta los 12 meses: lo ácido y lo amargo es menos apreciado, pero no es rechazado.
- 18-24 meses: afirmación de los gustos alimenticios, que contribuyen a la construcción de la personalidad del bebe.
- A partir de los 24 meses: se puede iniciar la fase de neofobia alimentaria, en la que se reducirá temporalmente sus gustos y preferencias.
Texto extraído del libro «Recetas, nutrición y dietética infantil», que se regala con la adquisición del robot de cocina chefy 6 de Miniland.