• Los móviles para cunas: las primeras semanas de vida los bebés pasan la mayor parte del tiempo tumbados en la cuna o minicuna. Los objetos colgantes para las cunas, con muñecos o con luz y música,  son una buena opción para entretenerlos, captar su atención y estimular su desarrollo. Además, estos juguetes les ayudarán a calmarse cuando están nerviosos y a conciliar el sueño. También son muy adecuados para ayudar al niño a aprender a fijar la vista y a enfocar mejor..

• Los sonajeros: son un clásico y no puede faltar en la lista de juguetes para tu bebé. Al ser ligeros, de colores y emitir sonidos, los sonajeros para bebés como First senses: Rattle o Baby Rain Roller, ayudan a estimular el oído, la vista, el tacto y la coordinación óculo-manual de los bebés.

• Los mordedores: son una herramienta muy útil cuando les empiezan a salir los primeros dientes, en torno a los 6 meses, porque son piezas que pueden morderse y sirven para calmar el dolor que produce la dentición. Los mordedores para bebés más sencillos están fabricados normalmente de silicona y también hay mordedores que forman parte de un juguete educativo, con una parte que sirve para estimular a través de muñecos y música.

• Los muñecos de apego: estas piezas ejercen un papel muy importante en el desarrollo del bebé durante los primeros meses de vida. Se trata de pequeños peluches de textura suave y acogedora, a los que el niño se aferra desde las primeras semanas. Sirven para que el bebé gane seguridad a la hora de dormir solo y tienen funciones psicológicas como, por ejemplo, calmar al bebé después del llanto. Los muñecos de apego pueden ser de formas muy diferentes, aunque los más comunes son el clásico muñeco de peluche o el doudou.

• Los libros para bebés: blandos, de tela y con tonalidades llamativas, los libros para recién nacidos son una buena alternativa como primer juguete. Al estar fabricados con materiales esponjosos, los niños pueden apretarlos y manejarlos sin riesgo alguno. Los hay que hacen ruido, lo que les llama más si cabe la atención y les incita a jugar con ellos. Un buen ejemplo es este Moogy Bath Stories, que pertenece a la línea Moogy de Miniland y permite utilizarlo en la bañera.

• Las barras y las mantas de actividades:  son muy útiles para activar el movimiento en el bebé y se recomienda introducirlas a partir de los tres meses de vida. Al tener muñecos colgando les estimula a mover los brazos y las piernas, mientras que los sonidos que emiten les invitan a hacer sus primeros ruidos y balbuceos. Son juguetes para el bebé que se pueden incorporar en el carrito de paseo, en los barrotes de la cuna o en la trona.

• Los espejos blandos: desde recién nacidos los niños se sienten atraídos por los espejos porque reflejan la luz y el movimiento. Es a partir de los 10 meses cuando el bebé tendrá más interacción con los espejos y será un juguete esencial para que tenga la noción de sí mismo. También ayuda a que reconozca los movimientos y a que mejore su coordinación. Estos espejos están fabricados con un material especial que evita que se rompan y que puedan causar algún daño al bebé.

• Las lámparas de luz: Aunque no es un juguete propiamente dicho, las lámparas infantiles les divierten mucho. La luz es uno de los elementos que más fascinan a los niños pero hay que tener especial cuidado con ésta, ya que la vista de un recién nacido es muy sensible y no puede soportar mucha intensidad. Por ello, una buena opción son las lámparas para bebés que reflejan en el techo formas y dibujos mediante luz muy suave. Además de éstas, también es interesante contar con una lámpara de mesita que ayude al niño a relajarse y conciliar el sueño.

Cuando vayas a comprar los juguetes para tu bebé además de tener en cuenta que correspondan a su edad, también es importante que elijas juguetes que sean de calidad y que cumplan la normativa establecida por la Unión Europea. En Miniland cumplimos estos aspectos tan importantes en nuestros juguetes y en los productos que creamos para el correcto desarrollo de tu bebé. ¡Descubre el mundo Miniland!